Noticias

Héctor Fernández Cubillos, académico Bachillerato en Humanidades: «El Bachillerato les da la posibilidad de asomarse a diferentes esferas del saber, que los llevan a descubrir nuevos mundos»

26 noviembre, 2020

Según el académico de la UAH el bachillerato «es una vía para alcanzar lo que andan buscando que, queriendo o sin querer, les aporta una formación integral y a una preparación para la carrera que desean acceder».

 

Héctor Fernández Cubillos es Licenciado en Filosofía por el Pontificio Ateneo Antoniano de Roma, Italia, y Doctor en Filosofía (Summa Cum Laude) por la Pontificia Universidad Antoniana de Roma, Italia. En la Facultad de Derecho de la Universidad Alberto Hurtado dirige el Programa de Acompañamiento de Estudiantes de la Facultad de Derecho UAH.

Se ha desempeñado como académico docente en pre y postgrado en diversas universidades nacionales, impartiendo cursos de Historia de la Filosofía Antigua y Medieval. Posee experiencia en programas de inclusión universitaria, como Director del Programa Propedéutico UAH y Coordinador del área de vinculación con las comunidades del PACE UAH.

Fernández conoce de cerca el Bachillerato en Humanidades, donde realiza los ramos de Filosofía Antigua y Medieval a los estudiantes de primer año. Su experiencia en el programa lo hace afirmar que la carrera es un acercamiento a la vocación humanista de la universidad que acerca a los estudiante con la historia, la literatura, la filosofía y más…

—¿Cómo describirías a los estudiantes del Bachillerato?

—Los estudiantes de Bachillerato me parecen, en su gran mayoría, estudiantes dedicados y sin grandes dificultades para el estudio, son curiosos y abiertos a las novedades que los cursos que realizan les ofrecen.  Un número importante no han tenido formación en humanidades lo que produce en ellos una fascinación por nuevas áreas del saber, muchas veces desconocidas o solo con referencias parciales y poco profundas. El Bachillerato les da la posibilidad de asomarse a diferentes esferas del saber, que los llevan a descubrir “nuevos mundos”.

 

Se trata, por lo general, de estudiantes comprometidos con sus aprendizajes y de una gran sensibilidad social, en sintonía y bien conectados con el mundo, además de serios y reflexivos en sus procesos.

 

—¿La mayoría entra por qué no saben qué carrera estudiar?

—Yo no diría que la mayoría entra sin saber que quieren estudiar, yo creo que la mayoría tiene claro que quiere estudiar, aunque no siempre sepan como llegar a lo que desean. Muchas veces la formación previa, el manejo de información, les juega un poco en contra… En ese sentido el bachillerato es una vía para alcanzar lo que andan buscando que, queriendo o sin querer, les aporta una formación integral y a una preparación para la carrera que desean acceder. El Bachillerato constituye un tiempo para vivenciar la vida universitaria y realizar una preparación a la experiencia académica, permitiéndole medir fuerzas y posibilidades, desarrollar áreas nuevas de aprendizaje y discernir sus intuiciones vocacionales, de manera que al acceder a la carrera específica que se busca le permita asumir mejor los desafíos académicos que comporta.

— ¿A quiénes recomendarías el Bachillerato en Humanidades? ¿Qué es lo positivo de este programa?

—A todos los estudiantes… especialmente a los que anden en búsqueda en el campo de las humanidades. El Bachillerato me parece un espacio de “nivelación” de conocimiento, una forma de recuperación y de restitución de saberes que los sistemas formales le has negado… es decir, lo entiendo como un espacio de equidad y de participación en el saber. El bachillerato abre al conocimiento de las humanidades, como una ventana a diversas disciplinas que permiten una formación integral, que va contra todos los procesos de especialización del saber que no siempre es capaz de dialogar interdisciplinarmente. El bachillerato me parece que da cuenta de la vocación humanista de la universidad, tendiendo a incluir a los estudiantes en una tradición intelectual centrada en la historia, la literatura, la filosofía… en fin, a las ideas y otras visiones de mundo. De alguna manera lo percibo como una oportunidad de crecimiento intelectual y de formación humana; caracterizado por la formación de habilidades académicas y del pensamiento crítico.

— ¿Por qué estudiarlo en la UAH? ¿Cuáles son sus mejores cualidades?

—La UAH me parece un buen lugar para estudiar, con dificultades y virtudes, refleja un proyecto en torno a las humanidades, una comunidad centrada en sus integrantes, preocupada por “las cosas humanas”, es un espacio de discusión y pluralidad, de búsquedas de equidad y justicia… los distintos lemas que la universidad ha tenido dan cuenta de su programa dentro del cultivo de las humanidades: formar buenos profesionales y mejores personas, con el deseo de cambiar el mundo y el rescate del pensar críticamente como modo humano de ser en el mundo.